Hay ocasiones en las que parece que el mundo se ha detenido para ti, y no encuentras qué hacer para ocupar el tiempo que tienes. Hay quien tiene bastante más ratos libres de los que le gustaría, y cuando se tienen demasiados se puede llegar a perder un poco la noción de la realidad. ¿Qué puedes hacer si estás inmerso en ese tipo de espiral? Bueno, puede que esto no sirva si llevas meses en tiempo muerto, pero al menos te ayudará a volver a ponerte en marcha.
Lee. Muchas veces nos quejamos de que no tenemos tiempo para leer, y cuando lo tenemos buscamos excusas para no hacerlo. ¿Por qué no tener un libro cerca y acudir a él aunque solamente tengamos cinco minutos? Además de ocupar el tiempo llenaremos nuestra mente de nuevas palabras, conceptos novedosos y hasta de ideas que nos pueden servir en un futuro relativamente cercano. Haz la prueba y seguro que no te arrepentirás.
Escribe. O lo que es lo mismo, ponte al otro lado. Seguro que al principio no sabes muy bien de qué puedes escribir, pero poco a poco te darás cuenta de que puedes aportar a los demás mucho más de lo que crees. Y si no tienes la intención de hacer públicos tus escritos, al menos podrás recurrir a ellos cuando no sepas qué leer. Puede que hasta te sorprendas dándote a tu mismo alguna idea. Un blog podría ser un medio excelente con el que comenzar tu andadura como escritor.
Cocina. Quizás te sorprendas de lo mucho que se puede hacer en poco tiempo en la cocina si estás organizado. Ten a mano algunas recetas para ponerte manos a la obra cuando no sepas qué hacer, y además de dejar de estar sin hacer nada podrás adelantar trabajo o ayudar a la familia. Incluso si vives solo/a puedes hacer comida para algunos días en los que quizás no tengas tiempo ni de comer bien.
Ya no tienes excusa para decir que no sabes qué hacer. ¿Se te ocurre algo más? Seguro que sí.
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