PRECAUCIONES SE PIDEN EN EL USO DE LA PIROTECNIA

Medidas de prevención ante un posible uso incorrecto de los artefactos de pirotecnia  

Las muy serias advertencias que, año tras año, formulan distintas entidades médicas acerca del riesgo que supone el uso incorrecto de los artefactos de pirotecnia, constituyen referencias que debieran ser ponderadas debidamente durante las ya inminentes celebraciones de Navidad y Fin de Año.

Es verdad que tales recomendaciones suelen confrontar, en nuestra ciudad, con la ya arraigada tradición de la quema de muñecos de fin de año, fiscalizada a través del registro previo de autorización que se concreta en Control Urbano de la Municipalidad y que, en los últimos días, tal como se informó en este diario, se tradujo en unas ochenta inscripciones y en algunos permisos denegados, por no cumplirse en los últimos casos con las reglamentaciones vigentes.

Según se indicó, con los distintos datos que se recaban se conforma el registro, a partir del cual la Comuna realiza un seguimiento y control de las estructuras con el fin de evitar accidentes, conflictos entre vecinos y problemas de tránsito. De acuerdo a lo establecido, las construcciones -muchas de ellas, inclusive, de indudable valor artístico- no podrán exceder los 6 metros de altura, los 3 metros de ancho, ni los 2 metros de largo.

Sin embargo, tal como se señaló, no han faltado severos llamados de atención. Así, el año pasado el Colegio de Fonoaudiólogos de La Plata advirtió sobre los traumas acústicos que suelen sobrevenir del uso de la pirotecnia y que pueden derivar en pérdidas auditivas permanentes e irreversibles.

A su vez, en años anteriores, desde la cartera de Salud bonaerense se determinó que los niños son los más afectados por los accidentes vinculados con el uso de pirotecnia, con lesiones tales como quemaduras en el rostro, manos y genitales, además de trastornos en los oídos.

En realidad, año tras año, la cartera sanitaria de la Provincia sugiere, directamente, “desistir del uso de pirotecnia como manera de festejo”. Es que no pocos profesionales consideran que el mayor peligro relacionado con la pirotecnia está en el desconocimiento del peligro que encierra. Aseguran que “no hay buena o mala, autorizada o no autorizada, cargada con pólvora negra o blanca; todos los productos son potencialmente nocivos”.

Lo que debe primar es la prudencia y el uso de elementos de pirotecnia más inofensivos. Festejar sin excesos y fundamentalmente, no dejar que los más chicos manipulen estos productos que son siempre peligrosos y que deben ser utilizados por los adultos. Porque además del control sobre los explosivos que se venden, debe existir una campaña de educación y prevención destinada a la población.

Desde hace años la noticia del día siguiente de la Nochebuena y del nuevo año la constituyen los lesionados, algunos graves como se ha mencionado, debido al uso de elementos de pirotecnia. Ese día sólo podrá informarse y sumar una cantidad a las estadísticas. Porque el tiempo de la prevención y las advertencias es ahora...