En términos de satisfacción del cliente, IOMA es tan mala como PAMI. Eso provoca no sólo un sentimiento de frustración entre los afiliados, sino un enojo hacia las autoridades que no modificación la situación.
En ese contexto irrumpió el proyecto del senador provincial Mario Ishii.
“Este proyecto generará una mayor competitividad entre las obras sociales, y como IOMA es la obra social de los empleados públicos de la provincia de Buenos Aires y suma a los afiliados voluntarios de la actividad privada, la convierten en la prestataria con más beneficiarios. Así que en cada crisis, problema administrativo, o cortes de servicios por parte de los prestadores ante la falta de pago, siempre sale perjudicada una gran canitdad de gente que tiene derecho a tener una prestación de calidad”, afirmó Ishii.
En los fundamentos del proyecto se resalta que “apunta a eliminar el término ‘obligatorio’ en lo referido a la Obra Social IOMA”, por lo que de esta manera los afiliados “podrán optar por el cambio de la obra social, todo esto en concordancia con las disposiciones de las Leyes 23.660, 23.661 y el Decreto 504/98 de la Nación.”
Ishii resaltó que con la iniciativa legislativa “se terminarán los reclamos por falta de pago de farmacias, clínicas, laboratorios y los médicos, las quejas de los afiliados voluntarios por la suba de la cuota, como también la falta de entrega en tiempo y forma a los afiliados de insumos, prótesis, drogas oncológicas y otras drogas muy caras y necesarias para la salud y vida de mucho bonaerenses; porque ante la posibilidad de un drenaje de afiliados ante la competitividad, sus autoridades se verán obligadas a mejorar el servicio y perfeccionar su administración”.
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